sábado, 9 de febrero de 2019

Antisistema

41 órbitas y media alrededor del astro rey. Y me recuerdo hace unos 17 años o así, en un momento en e que el sistema me acababa de soltar tremendo pescozón, que empecé, aunque por las razones equivocadas, a comprender. Las razones se han ido comprendiendo y corrigiendo.
Entonces, yo soy el sistema. Yo, que madrugo y trasnocho para cumplir con mi honrada obligación. Para cumplir con mi trabajo. Para hacer sociedad. Yo soy el sistema. Yo, que madrugo como un can, que de madrugada estoy activo. Que echo el día entero como quien dice. Que tengo una grieta llena de grafito que no cierra en el pulgar derecho (el dedo que nos da el poder, espabila, Willow Ufgood, primates somos, ya pecks o daikinis). 
Huye y apártate del sistema y lo que conseguirás es marginación. Tú no puedes, tú eres.
Antisistema son los que se pasan el día parasitándolo mientras minan su capacidad de protección.

Hoy, con el cerebro trastocado por el etanol cumpleañero, invoco tres grandes poemas encadenados de la sabiduría popular que es mi contemporánea y que me pertenece y enorgullece abanderar: 





Segi!!